El capo mexicano del cártel de Juárez José Antonio Acosta Hernández fue sentenciado hoy a siete cadenas perpetuas tras declararse culpable de narcotráfico y por su participación, directa o indirecta, en la muerte de más de 1,500 personas desde 2008, informó hoy el Departamento de Justicia de EEUU.
Acosta, también conocido como 'Diego', 'Dientón', 'Diez' y 'Bablazo', había sido extraditado desde México a Estados Unidos el pasado 16 de marzo.
Entre sus víctimas figuran la funcionaria consular estadounidense Leslie Enriquez, Arthur Redelfs, esposo de esta, y Jorge Salcido Ceniceros, cónyuge de otro empleado consular en Juárez.
Según los documentos presentados en el tribunal, el líder del cártel de Juárez en el estado mexicano de Chihuahua era socio de la violenta pandilla Barrio Azteca, que nació a finales de la década de los ochenta y se transformó en una organización del crimen trasnacional.
Michele Leonhart, director de la DEA se refirió al sentenciado como "un asesino a sangre fría sin respeto por la vida humana. Sus acciones violentas y mortales fueron interrumpidas gracias a los esfuerzos combinados de Estados Unidos para aplicar la ley y la voluntad del gobierno de México".