La mayoría de los ciudadanos de Estados Unidos justifica los "métodos de interrogatorio ampliados" que llevó a cabo la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en la lucha contra el terrorismo internacional, según una encuesta del Pew Research Center.
En el cuestionario hecho a 1,001 ciudadanos, el 51% dijo que están justificados los duros métodos, que un informe del Senado equiparó con la tortura. En tanto, 29% los consideró exagerados y 20% no tenía opinión al respecto.
Además, el 56% dijo estar convencido de que estas prácticas ayudaron a conseguir información importante para evitar otros atentados, frente al 28% que opinó que no fue así.
En otros, los métodos fueron el waterboarding (ahogamientos); privación del sueño y obligar a los detenidos a aguantar en posiciones dolorosas. Los críticos califican estas prácticas, utilizadas entre 2002 y 2009, directamente como tortura.