El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo estar "aferrado a la vida", luego de que llegara a su natal ciudad de Barinas tras recibir en Cuba la segunda fase de la radioterapia por la recurrencia de un tumor canceroso.
"Aferrado a la vida estoy y le pido a Dios, a Cristo, mi Señor, que nos siga dando vida", declaró el mandatario llanero, quien llegó al país poco antes de la medianoche del miércoles vestido con un conjunto deportivo.
En declaraciones a los pies de la escalerilla del avión presidencial y retransmitidas en cadena nacional, Chávez abundó en citas religiosas, con motivo de la Semana Santa, y se declaró "hoy más cristiano que nunca".
"En manos de Cristo me he encomendado. Con él y en él aquí estoy y aquí ando", añadió el gobernante, quien aseguró que su vuelo fue "más rápido de lo previsto" y contó que todos los exámenes que se le practicaron dieron "resultados positivos de recuperación".
El presidente venezolano, quien viajó a La Habana el pasado sábado, fue recibido con un caluroso abrazo de su madre, Elena Frías, así como por su padre, Hugo de los Reyes Chávez, sus hermanos, su hija María Gabriela, y ministros y funcionarios de su Administración.