BERLÍN (AFP).— Los conservadores de Friedrich Merz ganaron el domingo las elecciones legislativas en Alemania, delante del partido de extrema derecha AfD, que alcanza el mejor resultado de su historia, según sondeos a boca de urna.
Los conservadores de los partidos CDU/CSU obtuvieron 28.5%, según los sondeos difundidos por las televisiones públicas ARD y ZDF.
Alternativa para Alemania (AfD) obtuvo 20.5%, resultado inédito para un partido de extrema derecha en una elección federal en la posguerra.
El canciller saliente, Olaf Scholz, dijo que asume la responsabilidad de una “derrota amarga”. Su Partido Socialdemócrata (SPD) obtuvo apenas el 16%.
Otros perdedores son los Verdes, aliados del Gobierno Scholz, con 11%.
DUROS DESAFIOS
Friedrich Merz, un abogado de 69 años que tiene todas las posibilidades de reemplazar al socialdemócrata Olaf Scholz como canciller, descartó cualquier alianza gubernamental con AfD y declaró que quería que se pueda formar gobierno “lo más pronto posible” para hacer frente a los desafíos internacionales.
“Conseguimos un resultado histórico”, declaró la lideresa de AfD, Alice Weidel, ante sus simpatizantes en Berlín, y aseguró que el partido antiinmigración está ahora “firmemente anclado” en el panorama político alemán.

La campaña electoral estuvo sacudida por el regreso de Donald Trump al poder en Estados Unidos y el auge de la extrema derecha. Trump calificó la victoria de los conservadores como “un gran día para Alemania y para EE.UU.”. “Al igual que en EE.UU., la gente en Alemania se cansó de la agenda sin sentido común, especialmente en energía e inmigración, que ha permanecido por tantos años”, dijo Trump en una publicación escrita en mayúsculas en su plataforma Truth Social.
El jefe de la OTAN, Mark Rutte, felicitó a Merz por su victoria y afirmó estar deseando trabajar con él “en este momento crucial para nuestra seguridad compartida”. “Es vital que Europa dé un paso adelante en el gasto de defensa y su liderazgo será clave”, agregó en una publicación en la red social X.
Alemania afronta desafíos que sacuden su modelo de prosperidad e inquietan a la población.
El próximo Gobierno se enfrentará a la recesión económica, las amenazas de una guerra comercial con Washington, así como la puesta en duda del “paraguas” estadounidense con que contaba Alemania para garantizar su seguridad.
ALDO MARIÁTEGUI: «AFD NO ES VOX NI MELONI. ES OTRO ANIMAL»
«Las encuestas acertaron, los alemanes resultaron como de costumbre previsibles. A mí me gusta Merz, que es del ala derecha de los demócratas cristianos, es más liberal que Merkel, más decidido y con más carácter.
Merz va a enfrentar problemas serios. Alemania ahora tiene falta de competitividad: su industria automotriz está muy debilitada, su esquema manufacturero está obsoleto, no tienen tecnología moderna. Sus empresas no están entre las primeras del mundo en el sector tecnológico. Y Alemania es el motor de Europa. Si Alemania no va bien, el resto de Europa no va bien, porque la economía alemana es casi la suma de la inglesa y la francesa. El hombre fuerte de la UE es Alemania.
AfD es un producto de Ángela Merkel, que fue un desastre, que cometió una serie de errores. Hay que notar que AfD —segunda mayoría parlamentaria y primera oposición— no es Vox, no es Meloni. AfD es otro animal. Es muy duro, tiene gente neonazi. Por ejemplo el nacionalismo español no es racista; en cambio, el nacionalismo alemán sí es racista. Otro punto interesante es que en el Este de Alemania ha arrasado AfD, mientras que en el Oeste ha arrasado la democracia cristiana. En el Este (salvo Berlín) los reflejos autoritarios no se han ido, siempre están cerca el comunismo y el fascismo, que son primos hermanos. Antes eran comunistas y ahora votan por un partido facistón. El este no se ha terminado de democratizar».
