Sao Paulo y Río de Janeiro reducirán las tarifas del transporte público, tras más de una semana de masivas protestas callejeras contra el alza de este servicio, informaron hoy autoridades de ambas ciudades brasileñas.
"Vamos a revocar el reajuste volviendo a la tarifa original" de metro, autobús y tren, anunció en conferencia de prensa el gobernador de Sao, Paulo Geraldo Alckmin, al tiempo que el alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, anunciaba la marcha atrás en el aumento del boleto de autobús.
El burgomaestre de Sao Paulo, Fernando Haddad, decidió revocar el aumento que había entrado en vigor este mes y que elevó el valor del pasaje desde 3 reales (unos US$1.36) hasta 3.20 reales (US$1.45); mientras Paes anunció una reducción de 20 centavos de real.
Autoridades de Recife, Joao Pessoa, Porto Alegre, Cuiabá, Blumenau y Montes Claros anunciaron ayer, martes, que reducirían el costo de los boletos tras violentas protestas
No está claro si estos anuncios apaciguarán a los manifestantes, quienes ahora reclaman por una serie de situaciones, desde la corrupción hasta la educación, un año antes de que Brasil se convierta en la sede del Mundial.