João Paulo Araujo Gomes es un sacerdote católico conocido en Brasil por su amor por los animales, en especial por los perros callejeros que deja entrar a misa con la intención de que alguno de los fieles los adopten.
Al estilo de San Francisco de Asís. El padre João, párroco de la iglesia de Santa Ana, no solo celebra misas en compañía de los tiernos animales, sino que también se dedica a rescatarlos de las calles y buscarles un hogar.
Además, mientras esta en la búsqueda de un hogar para sus perritos, los cobija en la iglesia y también los alimenta y los lleva al veterinario, todo con la ayuda de otros amantes de los animales.
“Siempre podrán entrar, dormir, comer, beber agua y encontrar refugio y protección porque esta es la casa de Dios y ellos son de Dios”, escribió el religioso en Facebook.
“Hoy fue el día de llevar a Belinha para la segunda sesión de quimioterapia. Se está poniendo hermoso y lleno de encanto. Mis caras en las fotos se deben a que me derrito con tanta belleza”, escribió el sacerdote en su cuenta de Instagram, en la que aparece abrazando a uno de sus perritos rescatados.
Esta labor le ha generado el cariño no solo de los perritos que rescata, sino de todas las personas de la comunidad a la que fue asignado en Gravatá, un municipio brasileño en el estado de Pernambuco.
Gracias a los esfuerzos de este sacerdote ejemplar, muchos perros fueron adoptados y la cantidad de estos animales callejeros se redujo en su zona de acción.