Horror en Brasil: Niña asesinó a su hermana embarazada para sacarle el bebé y vendérselo a otra mujer

A sangre fría. Una niña de 13 años mató a su hermana embarazada para robarle el bebé que llevaba en el vientre y dárselo a otra mujer a cambio de dinero. El escalofriante crimen ocurrió en la ciudad Porto Velho, en Brasil.

Según medios locales como Correio; Fabiana Sánchez (23), la víctima que tenía ocho meses de gestación, fue atacada por su hermana menor con una barra de hierro. Una vez en el suelo pero aún consciente, la menor le abrió el vientre con un cuchillo y le sacó el bebé. Otro menor de 15 años fue cómplice del asesinato. Se trata del hijo de Kátia Barros Rabelo (34), la mujer que había pagado por el bebé para enriquecerse con el recién nacido.

Mientras le arrancaban el bebé a la mujer, el hijo menor de la víctima identificado con las iniciales G.H.P.M (7), fue testigo del horripilante hecho. En un ataque de irracionalidad y para eliminar las pruebas del asesinato, la menor llevó al pequeño junto a río y lo mató a pedradas. Luego dejó su cuerpo.

Fue el padre de Fabiana Sánchez quien denunció el hecho ante la Policía, que, un día después arrestó a su menor hija y a su cómplice por el asesinato.

Kátia Barros Rabelo no participó en la carnicería, pero sí planeó cómo matar a la víctima. Según informó la prensa de Brasil, esta mujer había fingido, durante ocho meses, estar embarazada para engañar a un hombre adinerado con el que salía, que este era su hijo con el único afán de salir de la pobreza.

El bebé sobrevivió pese a ser arrancado del vientre de su madre. Al momento de su nacimiento, pesó 1,8 kilos y se encuentra bajo estrictos cuidados médicos. Este fue encontrado en la casa de su madre fallecida.

En tanto, el cuerpo de la víctima fue hallado por su pasado el pasado 21 de octubre; un día después fue capturada la asesina y su cómplice; mientras que el 23 fue detenida Kátia Barros Rabelo.

En su declaración ante la Policía, la menor de 13 años narró con total frialdad cómo asesinó a la víctima y a su sobrino e indicó que lo hizo en venganza porque no la defendió de los constantes abusos sexuales que afirma haber sufrido por parte del marido de su hermana, quien ignoraba sus quejas.

Añadió que no tenía “remordimientos de conciencia” y que hace tiempo quería matarla. La Policía del Brasil investiga el caso.