Brasil: Dilma Rousseff culpa a los opositores de crisis

En medio de la tensión política creada por la breve detención del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) por sus vínculos en el caso Petrobras, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, culpó a la oposición por la actual crisis que afecta al país "no solo en lo político, sino en la economía, la creación de empleos y el crecimiento empresarial".

La jefa de Estado señaló, además, que esta situación ha sido ocasionada por este sector por "su disconformidad por haber perdido las elecciones presidenciales de 2014 y que, por ello, busca adelantar los comicios de 2018".

Durante la inauguración de un proyecto de viviendas a bajo costo en Río Grande do Sul, la mandataria reiteró que "no tenía sentido" llevar por la fuerza a declarar a Lula puesto que el ex presidente "jamás se negó a colaborar con la justicia".

BUSCAN EL JUICIO POLÍTICOLa oposición anunció que, a raíz de los últimos acontecimientos que afectan directamente al gobernante Partido de los Trabajadores, buscarán retomar los trámites para un posible juicio político contra la presidenta Rousseff.

El jefe del partido Demócratas en la Cámara Baja, Pauderney Avelino, explicó que el primer paso será pedir mayor celeridad a la Corte Suprema para que emita una resolución que aclare cómo se debe realizar el trámite en el Congreso que permita destituir a la mandataria.

Al respecto, el diputado opositor explicó que esta instancia judicial publicó en diciembre pasado un fallo que dispuso la suspensión del proceso contra Rousseff por "errores de procedimiento", por lo que ahora se ha solicitado "aclarar cómo de ser conducido el trámite".

Avelino manifestó, asimismo, que esta petición a la justicia deberá ser tratada con "más urgencia" debido a que la Fiscalía sospecha de que Luiz Inácio Lula da Silva, antecesor y padrino político de la presidenta Rousseff, se enriqueció de forma ilícita con la trama de corrupción en la estatal Petrobras. Asimismo, considera que el dinero de la corrupción petrolera alimentó la campaña presidencial de Rousseff en 2014.

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