En el marco de violentas protestas contra medidas del Gobierno relacionadas con la inversión extranjera en concesiones mineras otorgadas por el Estado, el ministro del Interior de Bolivia, Carlos Romero, puso como condición para el restablecimiento del diálogo con los mineros que primero se esclarezcan las muertes de Rodolfo Illanes, viceministro de su cartera, y otras cuatro personas.
Romero descartó el posible diálogo con "criminales" en alusión a los dirigentes de la Federación de Cooperativas Mineras (Fecomin), a quienes responsabiliza del asesinato de Illanes, quien fue torturado y asesinado el jueves pasado por mineros con quienes iba a dialogar a fin de solucionar el conflicto que ha llevado a la obstrucción de autopistas.
En tanto, se anunció que los dirigentes mineros fueron denunciados por asesinato, robo agravado, organización criminal y atentados contra miembros de organismos de seguridad del Estado.