El presidente de Bolivia, Evo Morales, expresó su deseo de reanudar las relaciones diplomáticas con EE.UU. y acelerar el nombramiento de embajadores de ambos países. "Bolivia es parte de la cultura del diálogo y, en ese marco, queremos mejorar las relaciones", expresó el mandatario al salir de su primera reunión con el máximo representante diplomático y encargado de negocios estadounidense, Peter M. Brennan.
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Morales manifestó que "antes, EE.UU. nos decía que no tengamos relaciones con Cuba ni con Irán. Ahora, tiene buenas relaciones con ambos, una sorpresa, y nosotros no podemos estar fuera de estas relaciones en un contexto político internacional muy importante".
Por su parte, el funcionario estadounidense precisó que se puede trabajar para el beneficio mutuo de los países en comercio, educación y tecnología, medio ambiente y derechos humanos. Asimismo, Brennan no quiso dar una fecha de cuándo podrían reponer a los embajadores y señaló que se avanzará "paso a paso" antes de dar nada por hecho.
Brennan fue cauto, ya que, en la anterior legislatura del presidente Morales, Washington había nombrado un candidato a embajador, pero no recibió la aprobación de Bolivia. El diplomático hizo referencia también al convenio marco suscrito en 2011 por ambos países, el cual sentó las bases para reponer embajadores.
VÍNCULOS ROTOS EN 2008El mandatario boliviano expulsó al embajador de EE.UU. en 2008 por acusaciones de estar involucrado en un supuesto complot organizado por los grupos locales de derecha. Desde Washington se negaron las incriminaciones y se destituyó al embajador boliviano de la capital.
Morales, además, expulsó a funcionarios de la DEA, la agencia antidrogas de EE.UU., y un año después a los del programa de asistencia de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (Usaid) tras acusarlos de involucrarse con los sindicatos de los campesinos.