El presidente de EE.UU, Barack Obama, firmó hoy una orden que autoriza formalmente la puesta en marcha de recortes masivos al gasto público por unos 85.000 millones de dólares a partir de esta medianoche, informó la Casa Blanca.
Más temprano, el mandatario había descrito los 'ajustones' presupuestarios como "severos" y "estúpidos", ya que costarían empleos y tendrán un impacto negativo en la economía del país. Además, acusó a sus adversarios republicanos de ser responsables de esta situación.
Según la orden firmada por Obama, los recortes para el año fiscal 2013, que termina en setiembre próximo, se producirán de acuerdo con las cantidades calculadas por la Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB, por su sigla en inglés) en su informe enviado hoy al Congreso.
Recurriendo a la autoridad que le concede una ley presupuestaria federal, el gobernante autorizó las reducciones, que son producto de un pacto acordado en agosto de 2011 por el Parlamento para elevar el techo de la deuda, a cambio de elaborar un plan para la disminución del déficit que no se logró.
Así, el Pentágono sufrirá recortes por un 13%, mientras que el resto de los programas no relacionados con defensa afrontarán recortes por cerca del 9%.
En el documento de 83 páginas, dirigido a ambas cámaras del Congreso, la OMB advierte que los recortes tendrán un efecto "profundamente destructivo para la seguridad nacional, las inversiones domésticas, y las funciones principales del Gobierno".