El presidente de EE.UU, Barack Obama, expresó hoy su profundo pesar por los siete muertos que dejó el tiroteo en un templo sij ubicado en el estado de Wisconsin.
"Michelle y yo estamos profundamente entristecidos tras enterarnos del tiroteo que hoy trágicamente cobró tantas vidas en Wisconsin", dijo el mandatario en un comunicado divulgado por la Casa Blanca.
"En este difícil momento, la gente de Oak Creek debe saber que el pueblo estadounidense tiene a las víctimas en sus pensamientos y oraciones", agregó el gobernante.
Por último, Obama lamentó que "esta pérdida se produjera en un lugar de oración", y subrayó "lo mucho que la comunidad sij ha enriquecido el país, que es parte de la gran familia estadounidense".
Al menos tres personas también resultaron heridas de gravedad en el sangriento hecho registrado este domingo en la ciudad de Oak Creek. Se cree que la sétima muerte es la del agresor.