Un misil ruso cayó este miércoles 6 de septiembre en un mercado en la ciudad de Kostiantinivka, región de Donetsk, matando a 17 personas y dejando a 31 heridos, según las autoridades ucranianas.
El ataque a la ciudad industrial oriental de Kostiantynivka ocurrió horas después de que el secretario de Estado, Antony Blinken, llegara a la capital, Kiev, en una muestra de apoyo de Estados Unidos.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, condenó la “absoluta inhumanidad” del ataque, que según comentó había afectado a un mercado normal, tiendas y una farmacia. Señala que el número de víctimas podría ser mayor.
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El primer ministro, Denys Shmyhal, sostuvo que entre los muertos había un niño, y el ministro del Interior, Ihor Klymenko, dijo inicialmente que 16 personas murieron y 28 resultaron heridas en el ataque. Además, entre las víctimas se encontraba un rescatista.
En tanto, en una publicación posterior en Telegram, Klymenko revisó esas cifras y manifestó que 17 personas murieron y 32 resultaron heridas.
La explosión de fuego surgió de la nada y en segundos escombros y polvo volaban por el aire, en imágenes compartidas por Zelenskyy.
Los compradores estaban dando vueltas antes de la explosión. Durante un breve segundo, la gente se congela y después otros empiezan a correr.
Las imágenes registran autos y edificios en llamas, un piso ensangrentado en una tienda y escombros esparcidos por la calle.