Kim Jong-un quiere demostrar su poderío y lo hace a través de armas de largo alcance. Así lo demuestra una foto que le tomaron junto a sus mandos militares en la cual se le observa en plena celebración tras el lanzamiento de un misil desde Corea del Norte.
Esta fotografía, junto a las declaraciones del mandatario, fue difundida por la agencia de noticias estatal del régimen. Pero no fue la única foto. En otra, Kim Jong-un fue captado de espaldas mientras inspecciona el despegue del proyectil que desconoce su destino y trayectoria.
Como se recuerda, por la mañana del último viernes, se supo que Corea del Norte lanzó un misil que sobrevoló el cielo de Japón. Este accionar provocó la angustia de países como Estados Unidos que instó a Rusia y a China a rechazar este tipo de maniobras bélicas.
Al día siguiente, en un comunicado oficial del Corea del Norte, Kim Jong-un aseguró que su país "está cerca" de dotarse de una arma nuclear con el fin de equiparar fuerzas con la nación de Donald Trump.
La agencia estatal KCNA señaló que "la meta final es establecer el equilibrio de fuerzas real con Estados Unidos para que los gobernantes norteamericanos no osen seguir hablando de opción militar contra Corea del Norte".