(Reuters)
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Redacción PERÚ21

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Las centrales obreras opositoras de convocaron para mañana a la primera huelga general contra el régimen de , con el fin de exigir la disminución o eliminación del impuesto a las ganancias, un gravamen con fuerte incidencia en los salarios.

La huelga de 24 horas fue organizada por la Confederación General del Trabajo (CGT) liderada por el ahora opositor y la (CTA), que encabeza el disidente Pablo Micheli, en una demostración de fuerza de cara al Gobierno y los sindicatos cercanos al kirchnerismo.

La medida de fuerza afectaría al transporte aéreo, terrestre, del metro y ferrocarriles, el recojo de basura, el sector bancario, la venta de combustibles y la atención en hospitales, entre otros rubros.

Se realizarían además cortes de calles y accesos a en el marco del reclamo para que los trabajadores paguen menos impuestos a las ganancias, cuyo mínimo no fue actualizado al ritmo de la inflación y las subidas salariales, un aumento en las jubilaciones y la universalización de las asignaciones familiares.

La (FAA) y el gremio de peones rurales organizarán piquetes en distintos puntos del país.

Moyano, líder del influyente gremio de camioneros, fue hasta hace poco tiempo el principal aliado político sindical del gobierno de Fernández. Su liderazgo fue cuestionado también en el seno de la CGT, que se fracturó y ahora cuenta con una rama oficialista.

La CTA atraviesa una situación similar, con una facción oficialista liderada por Hugo Yasky.

Moyano anticipó hoy que será "un paro fuerte" y "lo más efectivo posible". El líder sindical aseguró además que adherirán gremios que no responden a su central sindical porque "el reclamo es legítimo, nadie lo niega: lo comparten los que están con el gobierno y los que no están con el gobierno".

"Por lo tanto, es bastante difícil negarse a esta realidad. Algunos trabajadores van a adherir directamente, más allá de lo que resuelva el secretario general del gremio", aseveró el jefe la CGT disidente.

El jefe de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, advirtió por su parte que si el gobierno no da respuestas a sus reclamos, "tendrá que venir un paro de 36 horas con movilización".