Redacción PERÚ21

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De acuerdo con un estudio realizado por científicos de la Universidad de Harvard, la Universidad de Massachusetts y la Oficina Nacional de Investigación Económica de , lo mejor que le puede pasar a un político es no ganar las elecciones presidenciales.

Esto, claro, porque los niveles de estrés producen un "envejecimiento acelerado", según determinó — para la algarabía de quienes mantienen su 1% de intención de voto — el informe científico publicado en la revista British Medical Journal en una edición especial de Navidad.

¿Por qué investigar algo como esto? Pues para averiguar si ser presidente está vinculado con la aceleración de la mortalidad, y ver cómo influye la responsabilidad política en las expectativas de vida de una persona una vez que esta ha alcanzado el poder.

¿Cómo hicieron? Pues compararon la media de vida de los políticos electos con aquellos que fueron sus competidores, aquellos que nunca llegaron a estar en el gobierno. Esto permitió descubrir que los presidentes viven 2.7 años menos que quienes no lo son, en promedio.

"Asumimos que ambos tipos de candidatos contaban con situaciones socioeconómicas similares y con el mismo riesgo de mortalidad", explicaron los autores en el informe según informó BBC Mundo.

540 políticos, que participaron en elecciones entre 1722 y 2015 en países de Europa, Oceanía y Estados Unidos, fueron analizados: 279 elegidos, 261 que no lo fueron.

"Observamos el número de años que vivió cada candidato tras ser elegido, en relación con la esperanza de vida de una persona de su misma edad y sexo durante el año de su elección", puntualiza el estudio.

"Ser elegido jefe de gobierno está asociado con un aumento sustancial en el riesgo de la mortalidad", concluyeron los científicos. "Si no tenemos en cuenta la esperanza de vida en el momento de la elección, observamos que los presidentes del gobierno vivieron 4,4 años menos que sus oponentes", sentencian.

Eso sí, los hallazgos del estudio no pueden extrapolarse a otros países porque la data usada para su desarrollo es muy específica. "Aunque incluimos datos de 17 países, nuestros resultados no pueden ser generalizados a otras naciones", explican los científicos a cargo.

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