Harvey es uno de lo más devastadores huracanas que ha azotado las costas de Estados Unidos. Su paso por el estado de Texas ha provocado daños materiales incalculables debido a que genera vientos máximos sostenidos de 75 millas por hora (120 km/h) y produciendo lluvias torrenciales.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) del país norteamericano advirtió que este sábado, Harvey ya redujo su intensidad. Ahora, se encuentra en categoría I, sin embargo, ha dejado a casi 300 mil personas sin electricidad y un sinfín de árboles caídos.
"Se espera que Harvey produzca hasta el próximo miércoles acumulaciones de lluvia de hasta 30 pulgadas (76 centímetros), aunque en algunas zonas aisladas esta cifra podría alcanzar las 40 pulgadas (101 centímetros)", informó EFE.