La marina germana puso a prueba los sistemas de artillería de la fragata Baden-Württemberg, un buque de casi siete mil toneladas que estará destinado principalmente a realizar misiones en el extranjero.
Esta nave se distingue, entre otras cosas, por poder permanecer en la zona de la misión por un periodo máximo de hasta dos años. El precio total del contrato por los barcos asciende a más de 2.000 millones de euros.
La entrega del primer buque de la nueva clase F125 a la flota teutona está prevista para mediados de 2017.