La policía de Alemania informó que se incautaron 850 kilos de fuegos artificiales y petardos en la vivienda de un hombre de 23 años aproximadamente, antes de las celebraciones de fin de año.
Los agentes fueron advertidos por un vecino del almacenamiento de una importante cantidad de material pirotécnico.
Las fuerzas del orden encontraron los fuegos artificiales y petardos empaquetados en el apartamento del joven, así como en una bodega y dos camionetas, declaró un portavoz de la policía de Hamburgo a la agencia de prensa DPA.
El material pirotécnico contenía unos 80 kilos de sustancias explosivas, es decir 80 veces el límite autorizado para un particular.
Los fuegos artificiales y cohetes ocupan un lugar central en las celebraciones de Nochevieja y Año Nuevo en Alemania, donde los habitantes lanzan importantes cantidades de material pirotécnico desde sus balcones y jardines.
El presupuestos dedicado por los alemanes a este tipo de artículos fue de 137 millones de euros el año pasado. Pero, el primero de enero está generalmente marcado también por las personas heridas o incluso muertas por los fuegos artificiales.
En el Año Nuevo de 2018 dos personas murieron, un niño resultó herido y cinco personas tuvieron que ser amputadas.
Este año se registraron varios heridos incluso antes de fin de año. Dos personas, entre ellas un adolescente de 14 años, perdieron dedos por explosiones de petardos, y otro joven de 18 años tuvo que ser hospitalizado con quemaduras graves.
Fuente: AFP