Un panorama desolador dejaron las violentas manifestaciones de los estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en los últimos días.
Al interior de la casa de estudios, se puede ver los diversos daños y destrozos causados tras el enfrentamiento de los estudiantes y los agentes policiales.
Restos de perdigones, pintas en la fachada, escritorios destruidos y teléfonos públicos derribados. La lamentable escena se repite a las afueras de la universidad, donde la puerta principal luce con piedras, palos y otros desechos.
Las protestas de los sanmarquinos se iniciaron por una presunta contratación improvisada de profesores que dictarían los cursos generales en la ciudad universitaria.
Para frenar esta ola de violencia, fue necesaria la intervención de la Policía. En tanto, la máxima autoridad de la universidad, el rector Orestes Cachay Boza, aseguró que está dispuesto a conversar con los estudiantes para llegar a un acuerdo en torno a sus demandas.