Vinculan al clan Sánchez Paredes con el narcotraficante Lucio Tijero

Nuevas evidencias que podrían vincular al clan de los Sánchez Paredes con el narcotráfico fueron mostradas anoche por el programa Cuarto poder. Una agenda de la pareja sentimental del narcotraficante Lucio Tijero con anotaciones sobre presuntas negociaciones abre un nuevo episodio en las investigaciones fiscales y judiciales a la familia trujillana.

La agenda de Luz Elena Tello Chávez, loretana de 52 años, registra –a puño y letra– confesiones íntimas, estados de ánimo y anécdotas del narcotraficante.

El informe periodístico hace hincapié en las presuntas maniobras para varias testimonios a cambio de varios miles de dólares.

En el año 2008, Tijero ya había comprometido al grupo trujillano al declarar ante el Departamento de Justicia norteamericano que había trabajado con Perciles Sánchez Paredes, el hermano mayor que fue procesado, sentenciado y luego absuelto por el delito de narcotráfico.

Las agendas datan de 2007 y 2008, y ahí se señala que los abogados de los Sánchez Paredes fueron a hablar con Tijero, dos meses después de que este revelará su vinculación con Perciles Sánchez.

Entre el 10 de setiembre y el 26 de octubre de 2008, la agenda señala lo siguiente: "Ojalá todo vaya bien a Lucio con los Sánchez Paredes"; Hoy habló con los Sánchez Paredes, Lucio negó todo lo relacionado con ellos"; "Hoy recogí los US$ 24 mil de los Sánchez".

DEFIENDEN SALADe otro lado, la Sala Penal Nacional aclaró que la designación del colegiado que tendrá a su cargo la vista de la causa del caso Sánchez Paredes y otros por delitos de lavado de activos se hizo respetando las normas legales vigentes.

El expediente fue remitido a la Sala Penal, que programó para el 26 de abril la vista de la causa. En este caso, la fiscal María Maguiña había decido no acusar a los Sánchez Paredes por lavado de activos.

TENGA EN CUENTA

- Lucio Tijero purga condena de 35 años de prisión por formar parte de una organización criminal dedicada al Tráfico Ilícito de Drogas.

- Purgó siete años de prisión en Estados Unidos y confesó haber conocido y visitado al colombiano Pablo Escobar.