Luis Ramirez Santos, un joven de 19 años, fue secuestrado saliendo de un centro de idiomas al que acudía en Pueblo Libre, y apareció 13 horas después asesinado. Su cuerpo estaba dentro de una bolsa, en una calle de San Juan de Lurigancho.
El caso es un verdadero misterio, pero ya comenzaron a aparecer las primeras pistas. Cuarto Poder presentó las últimas conversaciones que el joven tuvo por WhatsApp con sus amigos.
"Estoy secuestrado en Independencia, y herido", escribió en las horas posteriores a su desaparición, y antes de su trágico desenlace.
En el grupo de chat nadie le dio importancia a su comentario. El joven envió una foto de él, aparentemente desmayado.
A las 21:08 escribió de nuevo: "Weones, en serio, 10 000 por mi rescate". "Lucho, qué haces con el cel, no que te estás muriendo?", le escribió uno de sus amigos. Y como respuesta recibieron una foto de una herida suya.
Pero sus amigos no le dieron mayor importancia y continuaron gestionando la reunión de la noche. A las 21:10 escribió su último mensaje: "Estoy en una camioneta en movimiento".
Recordemos que la madre del joven recibió un mensaje de los secuestradores cerca de las 18:40 horas desde el celular de su hijo exigiendo la suma de S/20 mil por su desaparición.
Acto seguido, el padre del joven desaparecido se comunicó con los delincuentes llegando a un acuerdo de pagar un adelanto de S/1,500. Según la Policía, a esa hora Luis Ramírez ya estaba muerto.
¿Quién envió los mensajes? ¿Fue Luis o sus captores?
El cuerpo del joven fue hallado con cortes profundos en el estómago y el brazo derecho por un arma blanca.