San Juan de Lurigancho se convirtió en tierra de nadie por unas cuantas horas, en donde la justicia se toma por manos propias. Dos sujetos, que silbaron a una mujer, terminaron siendo víctimas del esposo de la misma.
Jaelo Orteaga Rojas y su sobrino Lenin Chávez se encontraban bebiendo alcohol. Vieron a una mujer pasar por su lado y decidieron silbarle. Pero no lograron notar que su esposo venía detrás. Empezaron a discutir, el indignado sujeto se fue a su casa y regresó con un arma.
Los testigos del AA.HH. 15 de enero señalan que el hombre disparó a Orteaga, dejándolo tendido en el suelo. Su sobrino intentó defenderlo para evitar su muerte, pero también resultó herido. Los vecinos comentan que no es la primera vez que el hombre armado utiliza su pistola en el lugar.
Luis Garay, el agresor, fue detenido por la policía y llevado a la Depincri. Allí alegó que actuó por defensa propia al ser atacado por tres hombres. También se comprobó que cuenta con licencia para portar armas.
Por otro lado, las dos víctimas fueron llevadas al hospital de Canto Grande para ser atendidos.