San Isidro: Ladrones se llevaron relojes de alta gama, pero dejaron las perlas

Un día después de que se denunciara el robo de relojes de alta gama y joyas valorizadas en más de 1.6 millones de dólares en dos departamentos de lujo en la zona del Golf de San Isidro, la Policía halló parte de las alhajas en el colindante edificio en construcción.

Estaban en el octavo piso de la obra, a cargo del consorcio Palo Alto y F&P Inversiones, lo que confirmaría la hipótesis de las autoridades y de los agraviados: los hampones entraron y salieron por dicha edificación.

Allí, sobre el piso de cemento granulado, estaba el cajón de alhajas que los delincuentes habían robado del dúplex ubicado en los pisos 8 y 9 de la avenida Aurelio Miró Quedada 744.

¿LA MALDICIÓN?

Ese cajón –que requería una clave para ser abierto– fue forzado y en el suelo estaban regados collares de selectas perlas de varios colores.

Quizá los ladrones dan crédito a la leyenda sobre la maldición de la ‘Perla Rosada’, que cuenta que todo aquel que osaba robarse alguna encontraría la muerte. De momento, se desconoce el valor del botín abandonado.

Giovanni Galli, representante legal de las familias agraviadas, refirió que el costo de cada uno de los relojes y alhajas que los ladrones se llevaron oscila entre US$20 mil y US$100 mil.

“No hay ninguna duda de que ellos sabían el costo por cada joya y reloj. Lo que han dejado no tiene nada que ver con lo faltante”, indicó Galli. Del otro departamento –un tríplex– se llevaron 117 relojes de alta gama.

A las 8 de la mañana de ayer, la División de Investigación Criminal (Dirincri) efectuó la diligencia en el edificio en construcción, donde acudieron representantes de la empresa, así como las familias agraviadas y personal de fiscalización de la Alcaldía de San Isidro. Esto se prolongó hasta las 2:30 de la tarde.

Los peritos sacaron las alhajas abandonadas en cajas selladas. Según fuentes policiales, no hay ninguna persona detenida.

CLAUSURAN OBRA

La Municipalidad de San Isidro, en tanto, anunció la paralización temporal de la obra porque la empresa inmobiliaria ayer se negó a presentar la relación de sus trabajadores. Se impuso, además, una multa de 4,300 soles, equivalente a una unidad impositiva tributaria (UIT).

El municipio subrayó que las diligencias de la Gerencia de Fiscalización Administrativa se han efectuado de manera periódica desde el inicio de los trabajos hasta la fecha.

En octubre pasado, detalló, se verificó la operatividad de las dos cámaras de seguridad de la obra y aseguró que ayer ambas funcionaban.

SABÍA QUE

 -Perú21 acudió a la obra e intentó comunicarse con el ingeniero a cargo, pero no hubo respuesta. Por vía telefónica dijo que el tema era policial y no iba a declarar, pese a que el domingo se comprometió a hacerlo.

- El municipio indicó que el cierre de la construcción se levantará cuando subsanen las objeciones.