La Contraloría General detectó que el Programa Nacional de Asistencia Alimentaria (Pronaa) distribuyó más de 10 millones de raciones incompletas y dejó de entregar cerca de tres millones de raciones a niños de 6 a 12 años de edad que padecen desnutrición crónica.
La acción de control correspondiente al año 2009 determinó que de las 112´760,382 raciones de desayunos y almuerzos distribuidas en el año, 10´425,909 estaban incompletas; además, no se entregaron 2´939,845 raciones a los escolares.
Esta situación afectó a más de 500 mil niños pobres beneficiarios del programa, pese a que se encontraban programadas y presupuestadas.
Además, la auditoría reveló que solo se efectuó el 3% de las supervisiones integrales programadas para el 2009, lo que impidió que los encargados del Pronaa puedan identificar sus deficiencias y aplicar las medidas correctivas oportunamente.
La Contraloría identificó responsabilidad administrativa a 20 funcionarios y servidores del Pronaa, quienes deberán afrontar los procesos que se inicien a partir de este informe de control.