Erix Salva Plácido fue rescatado por agentes de la Policía. (Captura: Cuarto Poder)
Erix Salva Plácido fue rescatado por agentes de la Policía. (Captura: Cuarto Poder)

Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Cuando Erix Salva Plácido bajó de su auto para ingresar a la empresa de su padre, no se imaginó la tortura que le esperaba.

Su papá es un pequeño empresario, dueño de una compañía que distribuye papas procesadas a diversas pollerías de la ciudad. Hace cuatro meses había contratado a Jhon Parra Carrizo, un joven venezolano en busca de trabajo.

Precisamente fue este individuo quien se acercó amablemente para conversar con Erix antes de que ingrese al local de la empresa. Hablaron durante unos minutos, hasta que un cuchillo se posó en la espalda del peruano, según un reportaje de Cuarto Poder.

De inmediato lo condujeron a un vehículo, y el carro de Erix Salva fue desechado en las calles de Mirones. Los secuestradores condujeron a su víctima a una casa alquilada en el distrito de .

Dentro comenzó el martirio. Erix fue amarrado con cuerdas, cinta y demás materiales a un colchón, mientras era constantemente amenazado con cuchillos y serruchos, dispuestos a mutilarlo.

Los autores del delito eran cinco ciudadanos de nacionalidad venezolana. El líder sería el mencionado Jhon Parra, quien reclutó a sus dos de sus hermanos menores, Josué y Yamilet Parra Carrizo. Además, integraban la banda André Ramírez Ramírez y Yorman Gonzales Haddad.

Entre las cinco personas se organizaron para grabar videos del secuestrado y enviarlos a su padre, exigiendo un rescate que, eventualmente, llegaría a los US$250,000.

El señor solo llegó a recolectar US$20,000, lo cual no fue suficiente para los criminales, quienes cambiaron de estrategia. Esta vez se dirigieron a la esposa de Erix. Amenazaron a ella y a su hijo si no conseguían el monto que pedían.

La familia de Erix Salva no se quedó de brazos cruzados e inmediatamente acudió a la Policía. Los efectivos le explicaron que un rescate era imposible, pues incluso lleguen a juntar el dinero, los delincuentes matarían a la víctima para que no los identifique.

Entonces pusieron en marcha un plan para ubicarlos. El método que usaban los vándalos para efectuar sus demandas eran simples mensajes de WhatsApp. En uno de ellos, el padre reconoció la voz de su antiguo empleado, y eso fue suficiente para que la División de Investigación de Secuestros y Extorsiones de la Dirincri diera con su paradero.

Los primeros en ser capturados fueron André Ramírez y Yamilet Parra, hermana del presunto autor intelectual. Luego cayeron Yorman y Josué, el otro hermano. Por último, encontraron a Jhon, de pie, al lado de su víctima en evidente estado de deshidratación.

Comenzó a mencionar excusas y mentiras que terminaron enredándolo. Incluso quiso denunciar que él también fue secuestrado y todo fue plan de sus hermanos. Naturalmente, ninguna de sus artimañas prosperó.

Los cuatro varones fueron encarcelados, con una orden de prisión preventiva. En el caso de Yamilet, obtuvo comparecencia restringida, y no puede salir del país.

TE PUEDE INTERESAR: