:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/KDDCY7CEZNHJJM3UOKHZYRJUHE.jpeg)
Tras los hechos ocurridos el 14 de noviembre, cuando se desarrolló la Segunda Marcha Nacional contra el régimen de Manuel Merino, la Municipalidad de Lima precisó este domingo que no pudo entregar a las autoridades las imágenes de la cámara de videovigilancia instalada en el cruce de las avenidas Nicolás de Piérola y Abancay debido a que el equipo “se encuentra en mantenimiento debido a desperfectos técnicos”.
“La cámara ubicada en el cruce de las avenidas Abancay y Nicolás de Piérola no fue consignada en la entrega de los contenidos alcanzados a las mencionadas instituciones debido a que se encuentra en mantenimiento debido a desperfectos técnicos”, indicó el municipio en un comunicado.
MIRA: Municipalidad de Lima explicó las causas que generaron largas filas de ingreso al Parque de las Leyendas
La comuna indicó, no obstante, que sí pudo entregar al Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo las grabaciones de las 33 cámaras que maneja la Gerencia de Seguridad Ciudadana.
“Este material comprende tomas registradas en alrededor de medio centenar de calles, jirones y avenidas, en donde se aprecia el desplazamiento de personas, así como la acción de los efectivos policiales”, agregó la Municipalidad de Lima.
Precisamente, los reportes periodísticos indicaron que los más intensos enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía ocurrieron, durante los días de movilización, en la intersección de las avenidas Nicolás de Piérola y Abancay, ya que los agentes cerraron el paso ante un eventual avance a la sede del Congreso de la República.
MIRA: MML sobre presencia de ambulantes en Tierra Prometida: Fiscalizadores garantizarán el orden
Durante la movilización murieron los jóvenes Jack Bryan Pintado e Inti Sotelo Camargo a consecuencia del impacto de perdigones. El Ministerio Público inició una investigación sobre dicho casos, mientras que el ministro del Interior, Rubén Vargas, señaló, este domingo, que su sector se allana a las indagaciones y que “las responsabilidades son individuales y la Policía Nacional, como institución, no puede ser manchada por la actuación dolosa de alguno de sus elementos”.
