Que su esposa le pidiera el divorcio fue motivo suficiente para que Víctor Raúl Mauro Ibarra decidiera matarla, descuartizarla y permanecer con los restos del cuerpo durante todo un mes en la casa de sus padres en Surco.
El asesino dice no recordar cómo llegó a matarla pero sí la forma en la que la agredió; sin embargo, luego de acabar con la vida de su pareja procedió a planificar lo que haría con las partes del cuerpo.
“Y se levanta y yo en un descuido le agarro del cuello, por atrás, o sea yo le agarro así por atrás. Y de allí ya no la solté, yo no me acuerdo, en qué momento le he puesto los pies, no me acuerdo”, asegura el hombre que asesinó a su pareja para luego esconder los restos en un refrigeradora.
“Tantos días así, dije mejor lo corto y de allí me fui a buscar ese aparato y lo corté, o sea a cortarlo como podía, como yo no sabía usarlo bien”, agregó durante su confesión con la Policía.
Se presume que el asesinato se dio motivado por los celos y que existió premeditación, pues el sujeto, días antes, había pedido las llaves de la casa de sus padres en Surco con la intención de conducir a la mujer hasta el lugar y dejar sus restos en la vivienda.
Pese a que estaban separados, ambos convivían juntos en la casa que compartían con sus hijos. Pero los continuos celos del hombre provocaban peleas constantes.
HALLARON EL CUERPO
La víctima, Lucy Teófila Melgarejo Osorio (50), había sido dada como desaparecida hace un mes y sus dos hijos denunciaron ello ante la Policía. Tras las pesquisas, los detectives de la referida unidad llegaron ayer hasta la vivienda ubicada en la avenida Los Vicus, en la urbanización La Castellana, donde encontraron los restos cercenados de la mujer. Su cabeza estaba en una olla.
En el lugar también se encontraba el feminicida Víctor Raúl Mauro Ibarra, quien admitió ante la Policía ser el autor del homicidio.
Los detectives también hallaron un cuchillo y otras herramientas manchadas con sangre, así como una tabla de picar de plástico que habrían sido usadas por el feminicida para cercenar el cadáver