Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Personal del Instituto Nacional Penitenciario () intervino este viernes a una mujer cuando ingresaba al penal Río Seco () con tres celulares escondidos en una cabeza de carnero.

Rosa Elvira Soto Zapata (39) llegó con la testa del animal para que la cocine su hermano Carlos, recluido por robo agravado en el pabellón C de la mencionada cárcel. No era un día normal de visita, pero los familiares de los reos llegaron con sus encomiendas a la puerta de ingreso.

Soto Zapata será denunciada por posesión indebida de objetos, mientras su familiar fue aislado en otro ambiente como medida disciplinaria. "Las visitas tratan de ingeniarse de la mejor manera para ingresar objetos prohibidos. Hay cientos de formas. Hasta usan sus partes íntimas", dijo el director del penal de Río Seco, Guery Chirinos.

Frente a ello, indicó que cuentan con un plan de lucha antiextorsiones, para lo cual tienen agentes encubiertos en los servicios de vigilancia, a fin de detectar a personas en actitud sospechosa.

Chirinos dijo que la revisión sigue siendo manual porque aún no se han instalado equipos de escáner. Tampoco hay cámaras de videovigilancia ni bloqueadores de señal de celular.

Con casi 3 mil internos, el triple de su capacidad real, el penal Río Seco llega a recibir 1800 visitas en un solo día. Según la Policía, la mayoría de extorsiones provienen de las cárceles.

TAGS RELACIONADOS