Alberto Adrianzén e Hildebrando Tapia, integrantes del Parlamento Andino, informaron que Luis Fernando Cabeza Valdivia, el peruano que fue brutalmente agredido por agentes de la Policía de Florida (EEUU), fue trasladado de una cárcel común de Orlando al Centro de Detención de Inmigración de Crown (Miami), en donde recibirá la orden inminente de su deportación al Perú en un lapso máximo de 15 días.
"Nos comunicamos hoy (jueves) con los hermanos del peruano detenido. Ellos han perdido toda esperanza de otorgamiento de libertad a su pariente. Pagaron una fianza para ello, pero como el caso ha pasado a manos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE), la deportación es el camino inminente", sostuvieron.
Asimismo, señalaron que los familiares del joven les contaron que, al recibir la noticia de su expulsión, Cabeza entró en una crisis nerviosa, debido a que tendrá que separarse de sus familiares y amigos, dejar su trabajo y empezar desde cero.
Juan Carlos Cabeza, hermano mayor de la víctima, manifestó que han gastado alrededor de US$25 mil para sacarlo de la cárcel, pero ya no tienen más dinero para seguir apelando, por lo que pidió que cuando el estilista llegue a Lima lo ayuden para que pueda rehacer su vida.
Adrianzén y Tapia, señalaron que el tratamiento del caso de nuestro compatriota ha sido muy injusto pues, pese a la evidencia que demuestra que fue víctima de Frederick Dantes, un mal policía que tiene 10 juicios abiertos por abuso físico en su haber, lo separan abruptamente de su familia.
"Vamos a brindarle nuestro apoyo a este migrante peruano, quien ha sido víctima de una terrible injusticia. No es justo que mientras nosotros tratamos muy bien a los extranjeros en el país, nuestros connacionales reciban este tipo de trato", concluyeron.