El primer ministro Óscar Valdés rechazó hoy las acciones violentas de los mineros ilegales en Madre de Dios, que ya han cobrado la vida de tres personas, además de dejar 37 heridos y millonarias pérdidas económicas en la región.
"Ya no se puede esperar más. Estos mineros ilegales se están infiltrando, algunos ya son autoridades. Ya tenemos gente que está en el Parlamento y esto se tiene que detener, por el bien del país", dijo el jefe del gabinete en RPP.
Enfatizó que las personas que se dedican a esta actividad ilegal "no son pobres, sino que están haciendo mucho dinero. Se están enriqueciendo, no pagan impuestos, no dan trabajo de calidad, el oro se está yendo de contrabando a otros países".
Aunque dijo que el Gobierno actuará con firmeza contra este problema, precisó que no solo se centrarán en acciones represivas o de interdicción por parte del Estado, sino en trabajos de inclusión.
"Estamos haciendo todo un programa para incorporar a los mineros ilegales. También irá el Midis (Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social) con programas asistencialistas a las zonas alejadas", sostuvo.