Mollohuanca dijo que afrontará el caso. (USI)
Mollohuanca dijo que afrontará el caso. (USI)

Redacción PERÚ21

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El alcalde de la provincia cusqueña de Espinar, , reconoció que el estudio de Censopas sobre una presunta contaminación en su jurisdicción se realizó sobre el área de influencia de la minera Quechua y no de Xstrata-Tintaya.

Sin tomar en cuenta que este estudio originó protestas que dejaron dos muertos y decenas de heridos, el burgomaestre argumentó que para él dicho documento es válido solo porque Xstrata y Quechua "están a cuatro o cinco kilómetros de distancia", y que comparten, además, la cuenca de un río.

Sin embargo, saludó que el Gobierno haya creado una comisión para que realice un monitoreo ambiental de la zona. Además, se mostró dispuesto al diálogo y pidió al Ministerio de Economía y Finanzas que de su municipio.

Sobre su encarcelación, Mollohuanca se consideró "el primer preso de conciencia en el país" y denunció que se cometieron una serie de arbitrariedades en su caso. Exigió que no se metan presos a más dirigentes de las revueltas antimineras.

Anunció que afrontará el proceso judicial abierto en su contra, pero pidió que sea llevado de acuerdo al estado de Derecho y que el expediente sea visto en un tribunal de Espinar y no en Ica. Por ello, cuestionó que se haya creado un juzgado supraprovincial.