Redacción PERÚ21

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Tras las , el presidente de la Federación Minera de Madre de Dios (Fedemin), Luis Otzuka, anunció una tregua, a fin de retomar sus conversaciones con el Ejecutivo.

En declaraciones a América Noticias, Otzuka dijo que mantendrán "la calma hasta encontrar una solución viable en Lima", donde este lunes se reunirán con representantes del gobierno del presidente Ollanta Humala.

Asimismo, señaló que recibió una carta de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) para acudir este viernes a una reunión en Lima, pero que no puede viajar porque tiene que participar en el entierro de los tres manifestantes que ayer murieron en las refriegas con la Policía.

El ministro de Defensa, Alberto Otárola, indicó que para ayudar a la Policía a recuperar el orden en la región, e instó a los manifestantes a deponer su medida de fuerza.

CAMPEA LA INFORMALIDADDe otro lado, Miguel Santillana, investigador principal del Instituto del Perú de la Universidad de San Martín de Porres, reveló que solo el 7% del territorio de Madre de Dios es apto para realizar actividades mineras, según el Decreto de Urgencia 012, emitido en 2010.

Sin embargo, aseguró que dicho espacio ya se encuentra ocupado por oleadas migratorias desde los años 70, de las cuales solo 63 personas –de las 1,800 que iniciaron el proceso administrativo con el Estado peruano– lograron obtener una concesión plena.

"El resto tiene petitorios. Y piensan que solo el primer paso administrativo les permite operar, pero eso no es cierto. No se puede operar si no se tiene la licencia", dijo Santilla en Canal N.

El investigador mencionó que el problema se da en el territorio ubicado entre el kilómetro 98 y 123 (de Madre de Dios), el cual se vio desbordado por los nuevos migrantes. "Es así como, actualmente, existen unas 40,000 personas que se dedican a la minería ilegal en esa zona", acotó.