Desde su ingreso al penal de Ancón I, José Preciado Alegría (19), alias ‘Josecito’, y Fabricio Vera Diaz (27), alias ‘Bicho’ –dos de los tres sicarios que asesinaron a balazos a seis miembros de una familia en San Miguel–, vendrían coordinando y planificando su fuga, con apoyo de gente del exterior del presidio.
Para ello, era necesario que ambos simulen una dolencia corporal, una enfermedad o una lesión, que obligue a la evacuación de ambos a un hospital, donde serían finalmente “rescatados” por sus cómplices.
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Ante esta situación, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ha dispuesto el traslado de ambos internos a la cárcel de Challapalca, ubicada a más de cuatro mil metros sobre el nivel del mar, en la provincia de Tarata, región Tacna, por ser un recinto que cuenta con un régimen cerrado especial.
El INPE ha tomado en cuenta, también, la actitud y comportamiento negativos de ‘Josecito’ y de ‘Bicho’, quienes no se adaptan al régimen de vida y al tratamiento penitenciario, detalla una nota de prensa emitida por dicha institución ayer.
José Preciado y Fabricio Vera fueron dos de los tres sicarios que el 6 de febrero asesinaron a Israel San Román Doroteo, alias ‘La Tota’, a su esposa, a sus dos padres y a dos de sus hijos, cuando todos se encontraban a bordo de un auto, con dirección a la playa, en el cruce de las avenidas Riva Agüero y La Marina.
La División de Homicidios de la Dirincri determinó que uno de los autores intelectuales de este crimen fue David Durán, alias ‘Loco Paul’, y lo hizo por la disputa de cobro de cupos.