María Ysabel Cedano, directora de Demus, pide que se investigue y sancione a los responsables. (Perú21)
María Ysabel Cedano, directora de Demus, pide que se investigue y sancione a los responsables. (Perú21)

La denuncia presentada por un ha generado la indignación de los ciudadanos, al punto de que un grupo de mujeres realizara una movilización frente a las instalaciones del (INEI) exigiendo la renuncia de su jefe, Aníbal Sánchez.

María Ysabel Cedano, directora del Estudio para la Defensa de los Derechos de la Mujer (), considera que el Estado debe asumir su responsabilidad por incumplir con su deber de "garantizar el derecho a una vida libre de violencia y la libertad sexual de las mujeres".

En conversación con Perú21, María Ysabel Cedano explicó que el propio INEI informó en 2016 que "por lo menos medio millón de mujeres alguna vez ha sido agredidas sexualmente" por su pareja o ex pareja. 

"Se ha debido tomar sus precauciones durante las capacitaciones e informar con los protocolos de seguridad, lo cual hubiera evitado que esto suceda", acotó la directora de Demus.

Violencia sexual: Reportan 670 ataques a menores de edad entre enero y febrero. (USI)
Violencia sexual: Reportan 670 ataques a menores de edad entre enero y febrero. (USI)

Cedano subraya la carencia de un "enfoque de género", lo cual no permite un uso adecuado de la información. "Ellos saben muy bien que hay violaciones sexuales diarias contra niñas, contra adolescentes, contra mujeres adultas y mandan a sus voluntariados sin protocolos de seguridad, sin una garantía. Es ya el extremo de irresponsabilidad del Estado", refiere.

Respecto a las declaraciones del hermano de la víctima, quien sostuvo que un funcionario del INEI ofreció mil soles a cambio de no denunciar el caso, María Ysabel Cedano no ha dudado en condenar la actitud de este mal agente.

"Ese funcionario se ha quedado en una cultura que tranza económicamente la impunidad de una violación. El presidente del INEI tiene que pronunciarse, ¿qué pasó con sus protocolos de seguridad?, ¿qué pasó con la prevención de la violencia de género? y ¿qué medidas van a tomar para que estos hechos no se repitan?", cuestionó la abogada.

La directora de Demus indicó a este Diario que el INEI debe informar sobre las medidas que se van a tomar para investigar este caso y sancionar a los funcionarios que se encuentren responsables.

Cultura de Violación
Cultura de Violación

"El presidente del INEI mínimamente tendría que dar la cara e informar lo que se está haciendo para ella y para todas las otras mujeres que han sido agredidas sexualmente ayer. Hubo una violación y se están reportando más casos", advirtió la abogada.

Recientemente, . Cedano reconoce esta "dura realidad" pero agrega que se debe aceptar para cambiarla.

"NO SE PIENSA EN SEGURIDAD DE VÍCTIMA"

Agregó que el INEI debe dar cuenta sobre qué se ha hecho para atender a la víctima de 37 años. "¿Se ha descartado VIH u otra enfermedad de contagio sexual?, ¿se aplicó el anticonceptivo de emergencia para evitar un embarazo de una violación?", son algunas de las interrogantes que suelta.

"En lo último que se piensa es en la seguridad de los ciudadanos y en este caso mucho menos de las mujeres, y menos de la violencia sexual, que no se consideran en las políticas de seguridad ciudadana", sentenció.

María Ysabel Cedano calificó de "error" el silencio de la institución en este caso y que deben pronunciarse sobre las medidas que tomarán para que estos casos no continúen presentándose.

SOBRE LOS MEDIOS

La directora de Demus reconoce el papel fundamental de los medios de comunicación para dar a conocer los casos de violencia sexual hacia las mujeres. En diálogo con Perú21, la especialista indicó que si bien los medios deben regirse por la imparcialidad y no dar veredictos, el periodismo puede evitar que se tenga una visión errónea sobre las violaciones.

Esto tras las declaraciones del acusado, Marco Luza Segundo (45), quien sostuvo que el acto sexual tuvo consentimiento. "Si la hubiera violado, ella hubiera gritado", fueron sus palabras.

"Siempre buscan cierta culpa en la mujer. Que el vestido, que es coqueta. El 'no' es 'no' hasta el último segundo y la otra parte tiene que respetar y siempre se incurre en lo mismo".

Agregó que es erróneo decir que no fue una violación porque la víctima "no gritó o no se defendió", ya que esto refuerza falsas ideas sobre la violación y es aquí donde el periodista tiene la capacidad de cuestionar las declaraciones de una de las partes.