De un total de 46 aros de oro de 18 quilates, 24 pares de aretes del valioso metal, así como 14 pulseras y 32 dijes, valorizados en S/220 mil, se apoderaron unos delincuentes en contados minutos con solo realizar una llamada telefónica. Todo ello permanecía en una caja fuerte en la casa de una enfermera en Magdalena del Mar.
Una vez más se trata de la modalidad de estafa y robo conocida como ‘llamada millonaria’. En esta ocasión, uno de los hampones llamó al teléfono fijo del departamento de la enfermera de apellido Zelada, ubicado en un condominio de la cuadra 11 del jirón Larco Herrera.
El delincuente se identificó como el suegro de la antes citada y quien contestó fue una joven de 18 años, sobrina de la dueña del inmueble.
Le dijo que iban a realizarle una fiesta sorpresa a la enfermera, por lo que le pidió la laptop y los cubiertos de plata. Además, le dijo que le entregara los relojes, pero que previamente le tomara unas fotos y se las enviara por WhatsApp.
También le indicó que llevara la caja fuerte con todas las joyas que había en su interior. Así, la joven dio los valiosos objetos de oro a un sujeto en la puerta del condominio.
Recién después de entregar las alhajas, la joven llamó a su tía y se dio con la sorpresa de que todo había sido una estafa. Ambas presentaron la denuncia.
SABÍA QUE
- La joven que entregó las joyas dijo que el delincuente llegó en un auto blanco. La Policía está indagando a quién le pertenece el teléfono del cual se hizo la llamada.