Redacción PERÚ21

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Soñaba con tener a toda su familia unida como en su infancia, en su natal Cajamarca, y tenía planeado cumplirlo a fines de este año cuando concluyera sus estudios. consiguió tener a sus padres y hermanos juntos, pero no de la manera que ella anhelaba sino unidos por su violenta partida. Hoy todos la lloran desconsoladamente.

Eyvi nació y creció en el centro poblado San Juan de Pacay, en el distrito de San José de Lourdes, en la provincia de San Ignacio. Corrió y jugó con sus hermanos a sus anchas en la chacra y en el río. Muy rápido se hizo adolescente y, al concluir sus estudios de secundaria, decidió dejar su tierra en busca de un futuro en la capital.

"'Yo quiero estudiar, ser profesional, trabajar, ayudar a mis hermanos y a ustedes papá. Yo voy a cumplir mis sueños papá. Tenía 17 años... Así me dijo mi hija y así partió a Lima", recordó Ladislao Ágreda, padre de la joven.

"Era la hija más buena que tenía. De un corazón grande. Siempre preocupada por nosotros (padres) y sus hermanos. Lo poco que tenía nos enviaba. Ella estaba feliz porque este era el último año de estudios y después quería convalidar cursos para obtener el título en la universidad en la carrera de Negocios Internacionales", señaló muy afligido el progenitor.

Ladislao Ágreda recordó que Eyvi viajó hasta el centro poblado en marzo pasado para traer a la capital a su hermana de 17 años para que estudie. "Fue la última vez que vi a mi hija completita, sanita. He venido por mi hermana. Ella también tiene sus metas. Yo la voy ayudar. Mi mayor sueño es que tú (papá), mi mamá y mis hermanos vengan a vivir conmigo a Lima. Y así va a ser me dijo muy segura", contó.

En tanto, su hermana recuerda que Eyvi era una niña muy curiosa pues cuando llegaba a visitarla, buscaba el maquillaje en su cartera y empezaba a divertirse. 

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