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El penal de Picsi, ubicado en la provincia de Chiclayo, región Lambayeque, superó su capacidad en más del 100%. En los últimos meses, la población penitenciaria pasó de 2 mil 100 a 2 mil 753 reos, cuando solo debería albergar a mil 200 internos, reveló el director del reclusorio, César Campos.
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El funcionario indicó que el hacinamiento es tal que las cuadras compuestas por varias celdas, que deberían acoger a 40 presos, tienen más de 120 internos. Además, precisó que muchos reclusos deben dormir en el piso porque las celdas tienen hasta cinco personas, cuando estaban destinadas solo para dos.
"Es alarmante este problema. En los ambientes destinados a los dormitorios se tiene que ocupar el máximo espacio posible. En una celda, que debe ser para dos internos, ahora entran cuatro y hasta cinco", explicó.
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Respecto de la seguridad en el establecimiento, Campos detalló que en los últimos meses el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ha sumado más agentes que están ayudando a controlar a la población penal y efectuando constantes requisas. No obstante, dijo que se requiere más personal para evitar que la llegada de otros internos ocasione inconvenientes.
DATO-La misma situación se repite en los penales Río Seco, en Piura, y El Milagro, en Trujillo.
