Jimmy Manfreddy García Castillo, asesino confeso de Hellen Hernández Zavaleta y los dos pequeños hijos de esta en el distrito de Independencia, intentó minimizar su crimen, de acuerdo con los resultados de la prueba psicológica que realizaron los agentes de la Dirincri.
“No hay evidencia de trastornos psicopatológicos ni deterioro cognitivo que le impidan percibir y evaluar la realidad. Además, presenta un relato incongruente, donde intenta minimizar su accionar. Sin embargo acepta haber atacado con un arma blanca a las víctimas”, dijo el general Juan Carlos Sotil, jefe de la Dirincri.
El asesino confeso minimizó su participación en el crimen cada vez que habló de ello con la Policía Nacional. Durante su manifestación, relató a los agentes que cometió el asesinato debido a que Hernández Zavaleta le reveló que tenía otra pareja y que este lo habría amenazado de muerte.
“Está debidamente establecido que el móvil fueron los celos y el rechazo ante la respuesta negativa de ella y señalarle que ya mantenía relaciones con un ciudadano peruano que se encontraba preso y que lo tenía amenazado. Si lo veía en su compañía, lo iba a asesinar”, indicó el jefe de la Dirincri.
La Policía ya tendría las pruebas necesarias para que el sujeto sea condenado por los delitos de feminicidio y homicidio de dos menores de edad. García Castillo podría recibir cadena perpetua.