Vilma Chávez Luis, una madre de 50 años, fue asesinada a sangre fría frente a sus hijos, después de que la familia celebrara su victoria en un torneo de pelea de gallos.
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El pasado 27 de julio, la familia Chávez había ganado por primera vez un campeonato de pelea de gallos y estaba feliz. Sin embargo, esa misma noche, la felicidad se transformó en horror.
Eran las 2 de la mañana cuando Vilma, quien había salido a despedir a sus hijos y amigos que se dirigían a un evento en el centro de Huaral, fue asesinada. Mientras cruzaba la carretera Fujimori Fujimori en el centro poblado de Cuyo, un vehículo se detuvo frente a ella y uno de sus ocupantes le disparó en el pecho sin motivo aparente.
La madre de familia fue trasladada de urgencia al hospital de Huaral, pero lamentablemente no sobrevivió a la agresión. La policía logró capturar a los presuntos autores del homicidio en tiempo récord.
Jimmy Aldair Espinoza Paico, alias "Koreano", de 26 años, fue identificado como el principal sospechoso de disparar a Vilma. Junto a él, fue detenido Armando Alberto Espinoza Zambrano, de 44 años, señalado como el chofer del vehículo utilizado en el crimen. Ambos son presuntos miembros de una banda delictiva conocida como “Los Galleros de Cuyo”.
Las autoridades sospechan que el asesinato de Vilma Chávez podría estar relacionado con el reciente triunfo de su familia en la competencia de pelea de gallos. La policía no descarta que la victoria haya desatado la ira de contrincantes envidiosos, que decidieron vengarse de manera mortal.
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