Con fracturas en la mano, la muñeca quebrada, y la rotula de la rodilla, el talón y el hombro dañados quedó ayer un hombre luego que se cerraran de forma intempestiva las puertas de un bus del Metropolitano.
"Subí y la puerta se cerró intempestivamente dejándome atrapado medio cuerpo adentro y medio cuerpo afuera. El supervisor le dijo al chofer que parara, pero este avanzó medio metro y recién ahí abrió la puerta", denunció Paul John Urbina (32) en América Noticias.
Urbina se acercó al chofer a pedirle su identificación, pero este se negó y lo atacó. "Me trato mal y me dejó hasta Chorrillos, donde finalmente me enseñó su fotocheck", refirió.
Pese a que el incidente ocurrió cerca del mediodía, Urbina indicó que recién lo atendieron en una oficina de quejas a las 2 p.m., donde le dijeron que el chofer ya se había retirado y le inyectaron un ibuprofeno para el dolor.
Sin embargo, a las 6 p.m. fue finalmente llevado a una clínica, donde el diagnóstico fue más complejo de lo que aparentaba. Por lo mismo, indicó que denunciará el maltrato del que considera fue víctima.