La División de Robos de la Dirincri realizaba en Santa Anita un operativo con apoyo de la Sub-Unidad de Acciones Tácticas (SUAT), cuando los efectivos se percataron que un grupo de delincuentes perseguía a un empresario para robarle los US$100,000 que había retirado de un banco.
Producto de la balacera, tres delincuentes fallecieron y uno resultó herido. Los otros siete involucrados fueron capturados por la Policía Nacional.
El general PNP César Cortijo informó que los sujetos se desplazaban en cuatro vehículos y tenían armas de largo alcance.