Sí, ese sería el segundo reto. Necesitamos que los chicos lleguen a la escuela, pero que lleguen para aprender. Hay distintas mediciones y todas revelan que en promedio no nos ha ido tan mal, pero cuando entramos en detalle nos damos cuenta de que los chicos de escuelas rurales tienen peores resultados. Hemos encontrado estudiantes de cuarto o quinto grado que no saben leer. Esto nos alerta que necesitamos hacer esfuerzos.