Un abrazo interminable selló ayer el fin de la pesadilla que vivieron . Ambos abandonaron las prisiones en donde los recluyeron y si bien aún no tienen en sus brazos a sus mellizos, ahora –más que nunca– se saben fuertes e inseparables.

Fue la la que devolvió la libertad a la pareja de extranjeros, luego de que les revocara la prisión preventiva de 12 meses por comparecencia restringida.

La audiencia comenzó a las 9:30 de la mañana. El primero en tomar la palabra fue, abogado de los extranjeros, quien argumentó que en este caso no podía existir la posibilidad de un delito de trata de personas, porque los bebés eran hijos de su patrocinado.

Dijo, además, que se contaba con elementos que inicialmente no fueron valorados. “Sin prejuicio del ADN, ya antes teníamos la historia clínica de Chile, que es de 2013 para adelante; también la historia clínica en el Perú, en la que figura el tratamiento de útero subrogado”, señaló el letrado.

Sostuvo que “esta situación ha quebrado a una familia. Es lo peor que se le puede hacer una familia, sobre todo teniendo en cuenta la edad de los niños. Hay un grave daño físico y psicológico que hay que reparar”.

Por su parte, la fiscal superior Rosario Carpio tuvo que reconocer que en este caso no se configuraba el delito de trata de personas. “Ya en el desarrollo de la investigación se acumularon mayores elementos que lamentablemente no fueron valorados adecuadamente”, precisó.

Indicó que, además de los informes médicos, estaban los movimientos migratorios que demostraban cuántas veces había venido la pareja al Perú para lograr un sueño, “un deseo innato, natural de estos padres de querer tener niños”.

Al final de su intervención, expresó que “no se puede persistir en la prisión preventiva, sería arbitrario insistir en el delito de trata de personas, por lo que la Fiscalía se allana a la solicitud de la defensa técnica”.

LLAMADA DE ATENCIÓN
Tras escuchar a ambas partes, la sala de apelación pidió un receso de 45 minutos. Así llegó la noticia esperada: el juez Orlando Tapia dijo que no existían elementos de convicción contra los procesados, por lo que la medida de prisión preventiva debía ser revocada.

No obstante, señaló que se iba a continuar el proceso contra la pareja por el presunto delito de falsedad ideológica (por los documentos de identidad de los bebés). Y por ello es que dictó para ambos medidas de restricción.

Antes de dar por finalizada la diligencia, el juez recomendó a la Fiscalía llevar a cabo hasta la menor actividad de indagación a fin de determinar que se está frente a la existencia de un hecho punible. “Esto sin dejar de lado al juez que debe contar con una suficiencia de pruebas”, refirió Tapia.

Tras la decisión de la sala y como una medida excepcional, el aceptó –pese a no ser un día hábil– llevar adelante el procedimiento de excarcelación de los esposos chilenos. Es así que a las 7:30 de la noche, Jorge Tovar dejó el . Ella lo hizo dos horas después.

No obstante, la pareja aún no podrá sacar a sus hijos del albergue donde se encuentran, pues para esto se requiere un proceso que debe pasar por la Fiscalía y el Juzgado de Familia. Según el abogado Roberto Miranda, este trámite podría tardar entre 24 y 48 horas.

DATOS
La pareja no podrá salir del país mientras dure el proceso en su contra por filiación indebida. Deberá firmar cada 30 días el cuaderno de comparecencia en el . Ellos registraron como domicilio una vivienda en San Isidro.

, vicepresidente del INPE, dijo que solo en junio han salido absueltos 161 ciudadanos. “Es una cifra que nos preocupa, pues el INPE tiene que asumir la manutención de ciudadanos que jamás debieron cruzar una reja”, dijo.