La embajada de los EEUU en Lima informó que levantó la restricción sobre los viajes de sus funcionarios a la región Cusco, incluido Machu Picchu, que incluía una recomendación en el mismo sentido para sus ciudadanos.
El 13 de febrero pasado, el Gobierno estadounidense advirtió sobre los supuestos riesgos de secuestro a los que se exponían sus connacionales si visitaban la ciudad imperial, alerta que el Perú rechazó al señalar que no había podido confirmar la información de la que disponía Washington.
La embajadora de EEUU en Perú, Rose M. Likins, agradeció a las autoridades de nuestro país por la estrecha y rápida cooperación. "Quisiera destacar la amplia y decidida colaboración del Gobierno del Perú para fortalecer la seguridad en el Cusco, lo cual ha permitido reducir el potencial peligro contra ciudadanos estadounidenses", señaló la diplomática.
"El Perú es una estrella entre los países emergentes. Su inmensa riqueza cultural, su historia y maravillosa biodiversidad lo han convertido en un atractivo para el mundo entero. De Estados Unidos llegan al Perú cada año más de 360 mil turistas. Esto significa más de mil turistas estadounidenses al día, muchos de ellos con la ilusión de conocer el Cusco y Machu Picchu", agregó.