Se sienten olvidados. Los vecinos de la localidad de La Encalada, del distrito de Huachipa, piden ayuda no solo para limpiar sus viviendas —que quedaron inundadas tras el huaico—, sino también alimentos, agua, carpas y colchones para poder dormir.
"Nadie nos apoya ni la municipalidad distrital, ni el Gobierno Central. El huaico arrasó con nuestras casas el martes a las 4:00 p.m. y aún seguimos limpiando nuestras viviendas. Muchos lo han perdido todo", lamentó una vecina del lugar.
El huaico ha destruido varias casas ubicadas en las manzanas F y G de esa localidad y ha bloqueado las pistas de este sector que se ubica cerca del río Rímac.
"Hay varios niños que están sufriendo las picaduras de los mosquitos. Necesitamos también medicinas y que fumiguen nuestras casas", dijeron los damnificados de la zona.