Su metro y medio de estatura y su delgada figura no fueron impedimento para que el joven Juan Zuleta Gómez se enfrentara a un hombre robusto —que triplicaba su peso— y se pusiera como escudo para evitar que Brigitte Flores Luna fuera quemada viva por su pareja. Con esa acción, esa noche del miércoles, Brigitte no se convirtió en una víctima más de en nuestro país.

A las 9:30 de la noche en la puerta de Serpost, ubicada en la avenida Las Américas, , Julio César Rojas Mogollón (48), y Brigitte Flores Luna empiezan a discutir, luego de que el primer fuera al grifo —que estaba cruzando— a comprar combustible para la motocicleta. “Estaba en la esquina y vi que la golpeaba e insultaba porque le reclamó algo sobre la moto. La gente solo miraba y por eso me acerqué”, cuenta a este diario, el joven de 25 años, mientras trata de esquivar la mirada. Se rasca la cara y el cuello con timidez. Se cohibe.

Cuando Rojas le rocía el combustible a su pareja, Juan, quien desde hace siete años se dedica a lavar y a cuidar carros en la zona, se pone en medio de ambos e incluso le salpica combustible. El lavacarros intenta evitar que el fornido hombre le prenda fuego a la mujer cuando se da cuenta que saca el encendedor de su bolsillo. Brigitte Flores corre, pero una chispa prende la franela que estaba colgada en el canguro de Juan y le quema el polo. No tiene quemaduras, pero pudo ser peor.

Este hombre arriesgó su vida y ha sido catalogado por las autoridades y la sociedad como un héroe, pero él mantiene su humildad: “No soy ni Batman ni Superman. Solo la ayudé porque nunca me ha gustado que golpeen a las mujeres”, contó a Perú21, mientras las personas que transitan en la zona donde ocurrió el ataque le piden tomarse fotos o lo ovacionan.

El joven indicó que vive solo en la urbanización Manzanilla, por La Parada. La tarde de ayer la Policía lo ubicó y lo trasladó a la Depincri de La Victoria para que rinda su manifestación sobre el caso.

Joven limpiacarros salvó a mujer de ser quemada por su pareja