El fenómeno del Niño Global ha ocasionado una crisis hídrica en nuestro país, golpeando ecosistemas naturales como la laguna de Paca, una fuente fundamental de abastecimiento de agua en la capital. Actualmente, son siete los distritos afectados. Conoce cuáles son y qué deben hacer las familias limeñas para mitigar el impacto.
Según la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass), Pucusana, Pachacámac, Chaclacayo, Ancón, Ventanilla, Santa Rosa y Lurín están experimentando recortes en la disponibilidad continua de agua.
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En este contexto, las familias peruanas se constituyen como actores primordiales en la contención de la escasez de agua. Para Johnny Quispe, product manager de tanques Eternit, la recolección y almacenamiento de agua, y la capacitación a las familias en materia del cuidado del agua son una tarea pendiente que involucra a todos.
Ante la crisis hídrica, adoptar medidas conscientes en el hogar se vuelve imperativo para asegurar un futuro sostenible. A continuación algunas acciones esenciales para enfrentar este problema:
- Uso de tanques de almacenamiento: La incorporación de tanques de agua en las viviendas cobra una importancia vital para las familias. Estos sistemas de almacenamiento no solo aseguran un abastecimiento constante en tiempos de escasez, sino que también desempeñan un rol crucial en la protección de la salud. Al almacenar agua de manera segura y cerrada, reducen el riesgo de contaminación y propagación de enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue.
- Planificación del agua: El uso planificado del agua implica adoptar prácticas conscientes y responsables para maximizar su eficiencia. Mediante la implementación de pequeñas acciones, como cerrar el grifo mientras se cepillan los dientes o reparar fugas, las familias pueden contribuir significativamente a la conservación del agua.
- Respaldo en casos de escasez: En momentos de interrupciones en el suministro público, como cortes imprevistos o reducciones de la presión del agua, los tanques de agua actúan como una reserva vital en los hogares asegurando que la familia tenga acceso a agua para necesidades esenciales, como beber y cocinar.
- Correcto almacenamiento del agua: La reserva de agua se vuelve esencial para las familias, especialmente en situaciones de escasez. Mantener sistemas de almacenamiento adecuados, como tanques de agua, garantiza un suministro confiable en momentos de interrupción en el abastecimiento público.
- Educación y conciencia: Promover una cultura de uso sostenible en el hogar es esencial para enfrentar de manera efectiva la crisis hídrica. Así, las familias tendrán la oportunidad de conocer sobre la importancia de la conservación del agua y la gestión responsable de este recurso.
Finalmente, Quispe hizo hincapié en que la crisis hídrica en Perú requiere de un enfoque integral donde las familias desempeñan un papel crucial en esta lucha: “Al implementar acciones sostenibles en el hogar, se contribuye de manera significativa a la mitigación de la escasez de agua y a la construcción de un futuro más sostenible para las generaciones venideras. La responsabilidad comienza en casa y cada esfuerzo cuenta en la búsqueda de soluciones para enfrentar esta crisis hídrica”.
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