Un reservista intenta venderle un panfleto a una compradora en Gamarra. (Foto: Iris Mariscal)
Un reservista intenta venderle un panfleto a una compradora en Gamarra. (Foto: Iris Mariscal)

A pocas horas de celebrarse la , las calles de , en La Victoria, lucen desbordadas de ambulantes y compradores que buscan regalos a última hora, una estampa clásica de todos los años.

Desde las 9 de la mañana, llegan los primeros ambulantes y ganan las pistas y veredas. En un plástico colocan sus productos y comienza la guerra sonora. “Barato, barato”, grita una pareja ubicada en el cruce de Gamarra con él jirón Hipólito Unanue. Al costado, otra mujer vendiendo lo mismo intenta superar los gritos de su compañera y afirma que todo está en “remate, remate”.

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El panorama luce más caótico llegando al mediodía. Unos ‘jaladores’ toman del brazo a cualquier incauto que pasa por las galerías mirando las prendas de temporada. Todos afirman que tienen el mejor precio y la más grande variedad.

Caminar por esta zona comercial es casi imposible. (Foto: Iris Mariscal)
Caminar por esta zona comercial es casi imposible. (Foto: Iris Mariscal)

El recorrido de los clientes es acompañado por vendedores de gelatina, marcianos, agua y gaseosas. A unos metros del parque Cánepa, otros ofrecen chancho al palo, ceviche, pescado frito y otros platos emblemas del Perú. Los precios van desde los 5 soles en adelante.

Pasadas las dos de la tarde, más gente llega a una de las zonas comerciales más grande del país, causando una procesión que hace que caminar tan solo una cuadra pueda tardar hasta cinco minutos. Los carretilleros también ayudar a congestionar más las calles.

Las rejas colocadas en diversas intersecciones hacen que el tránsito de personas sea más complicado aún y pone en riesgo la vida de muchos en caso de que se presente algún incendio, terremoto u otra emergencia, pues solo han dejado abiertas dos pequeñas puertas y la cola que se forma para pasar es interminable.

Si pensaba que en el jirón Gamarra todo era muy desordenado, en el jirón América es peor. Cientos de ambulantes han lotizado las pistas para comercializar ropa, alimentos y maniquíes.

Ambulantes tomaron las calles. (Foto: Iris Mariscal)
Ambulantes tomaron las calles. (Foto: Iris Mariscal)


UNA COMPRA SEGURA

Si usted acudirá a Gamarra en estos días, es importante que recuerde no llevar mucho dinero y en la medida de lo posible, vaya sin su celular pues son fácilmente sustraídos en las aglomeraciones.

Evite ir con niños o recién nacidos. Además de la multitud, es aconsejable no exponerlos al intenso calor propio de esta temporada.

No vaya con su vehículo. Recuerde que todavía se siguen ejecutando obras en la avenida Parinacochas y el tráfico es intenso y desesperante. Además, las cocheras suelen estar llenas.

Esté siempre alerta con sus compras y guarde bien su dinero.

La mejor hora para ir a comprar es en la mañana. (Foto: Iris Mariscal)
La mejor hora para ir a comprar es en la mañana. (Foto: Iris Mariscal)

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