Unos 40 comerciantes se enfrentaron a la Policía Nacional para evitar que desalojen sus puestos de venta que fueron instalados de forma irregular sobre una zona arqueológica de Collique, en Comas. Personal de la Municipalidad de Comas derribó los puestos de madera.
Los comerciantes indicaron que hace un año la propia comuna los trasladó a ese lugar y que el desalojo se efectuó sin aviso.
"El municipio nos reubicó aquí de forma temporal. Ahora nos han desalojado y no tenemos a dónde ir. Pedimos al alcalde de Comas, Miguel Ángel Saldaña, que nos reubique en otro lugar", señaló Hilario Suárez Terrones, presidente de la Asociación de Comerciantes.
El procurador del Ministerio de Cultura, Javier Paredes, indicó que el desalojo se ejecutó de forma extrajudicial, tras agotar el diálogo con los vendedores.
"Hemos estado en conversaciones con los comerciantes hace un año para que abandonen este lugar. Les hemos exhortado, pero no nos han hecho caso", manifestó el funcionario.